Desde el principio de la etapa, el equipo Movistar, sabía que es lo que debía y tenía que hacer, controlando la carrera, haciendo trabajar a todos su peones, no dejando que tomaran tiempo la escapada que se forma desde el banderazo, primero sería el el francés Pierre Roland (Europcar) en busca de lograr el maillot de lunares de rey de la montaña, ya que estaba a solo un punto de Froome en la clasificación, seguid amente lo acompañarían Marcus Burghardt (BMC), Jens Voigt (Radioschak) y Juan-Antonio Flecha (Vacansoleil) y en el kilómetro 14 se les unirían Cyril Gautier (Europcar), Christophe Riblon (AG2R- La Mondiale), Pavel Brutt (Katusha), Mikel Astarloza (Euskaltel) y Simon Clarke (Orica Greeedge), y Igor Antón (Euskaltel).Movistar sigue controlando y no deja que la diferencia aumente a más de 1 minuto. Rolland suma puntos en el col de Aillon le Vieux y en el col de de Prés. En la subida a Mont Revard, se queda descolgado y se marcha en solitario el alemán Jens Voigt, quedan 60 km para la meta. El corredor alemán corona la ascensión en primer lugar, mientras que sus antiguos compañeros de fuga son alcanzados por Gilbert y Van Garderen (BMC) y, posteriormente, por Vuillermoz (Sojausun).
Jens Voigt sería neutralizado a falta de 8 kilómetros para la meta, y en cabeza quedan solo ocho corredores. Joaquín Rodríguez pasa entonces a la ofensiva, en busca de sacar tiempo con Contador, y hacer podio. Se sumarán a él Nairo Quintana, luego Chris Froome, mientras por detrás quedarían Contador y Kreeuziger.
El trio de cabeza consigue abrir hueco importante con Contador. Quintana ataca en el último kilómetro y se adjudica así su primera victoria del Tour de Francia, haciéndose además con el maillot de lunares, el blanco de los jóvenes y el segundo puesto en la general.